Existe una gran variedad de accesorios que pueden resultar muy útiles al buceador, otros como las tablas son imprescindibles. A continuación se describen los más comunes.
Indispensables cuando se bucea es sitios de poca visibilidad o para encontrar el camino de vuelta sin necesidad de salir a la superficie para ver donde se está.
Se componen de una caja estanca rígida, que contienen una aguja graduada inmersa en un líquido la cual apunta hacia el norte. El líquido ayuda a que no le afecte la presión.
Suelen llevar una corona graduada móvil en el exterior para memorizar el rumbo.
Existe una diferencia entre el norte geográfico y el magnético, y es que este último se encuentra a más de 1600 km. al sur del primero. Esto se llama variación y figura en las cartas marítimas.
Son útiles para sujetar objetos al chaleco y llevarlos siempre a mano. Mediante gancho carabiners se asegura que el equipo está firmemente sujeto al chaleco durante la inmersión.
Sirven para remontar objetos desde el fondo. Se hinchan con el regulador en posición de purga continúa (también se pude llenar el globo con las burbujas espiradas). Algunos llevan una purga de sobrepresión, para evitar el riesgo de balanceo durante el ascenso.
También se usan, para ayudar en las paradas de descompresión en mar abierto, colgando del globo que está en superficie un cabo. Al mismo tiempo, indica al barco la posición del buceador.
Fabricadas en plástico, son aconsejables para comunicarse con los compañeros, o en caso de emergencia para hacer un recálculo con las tablas de descompresión. El lápiz escribe bajo el agua, que no se borra con facilidad.
Las planas se sujetan al chaleco o se guardan en un bolsillo, y las de muñeca se ajustan al contorno.
Indispensables en caso de emergencia para poder realizar un cálculo de tiempo y profundidad para descompresión. Están fabricadas en plástico, con pintura indeleble.
Es recomendable fijar la tabla al chaleco con un hilo de nylon.
En él se escriben las inmersiones y entrenamientos que realice un buceador, así como ofrecer datos de interés que puedan ser necesarios durante la práctica del buceo. Es importante tenerlo actualizado, ya que sino no se tendrá nada que demuestre las inmersiones producidas y los conocimientos adquiridos.
Permiten el desplazamiento del buceador sin esfuerzo, sin aletear. No son baratos, pero existen modelos más económicos para el buceo recreativo. Los más caros están destinados al buceo profesional, donde no pueden fallar./p>
Funciona de manera eléctrica, mediante una batería que alimenta el motor que mueve la hélice, la cual debe estar situada dentro de una jaula. Los modelos de turbina, suelen ser para superficie.
Estos aparatos permiten ampliar el campo de acción del buceador, así como paliar los efectos de la contracorriente.
La velocidad máxima es de 3 km/h como máximo para evitar que la máscara se caiga, por ello se debe tener cuidado de sobrepasar la velocidad de ascenso durante los desplazamientos verticales.
Existen de dos modelos: los que se colocan entre las piernas y los que se agarran con las manos.
Es recomendable elegir un modelo con autonomía superior a 30 minutos, y en los periodos que no se use, e debe cargar cada tres meses, y hacerlo funcionar unos minutos en el aire.
Creadas por una empresa californiana, son dos propulsores que se sujetan a las piernas, controlándose mediante un interruptor situado en la cintura. Presentan la ventaja de que las manos están libres, y algunos superan incluso la potencia de un DPV.